guardar sus recuerdos en una capsula del
tiempo,
en algo que a su vez es una delicada obra
de relojería.
Conservamos nuestro rostro en una imagen
de alta calidad,
Conservamos cada minuciosa marca, cada
fotograma,
Cada desperfecto al hablar, cada momento
falsamente vivido.
Yo por ejemplo conservo árboles, edificios
y mascotas
que
hace mucho desaparecieron. Y a veces confundo mi memoria
con aquellos cúmulos de información, y a
veces pienso en aquellos días
como algo que debo sentir junto a cada
fotograma.
Cada recuerdo termina siendo un
hipervínculo, pero
Mi disco duro es un enorme basurero.
Está lleno de errores que debería olvidar
Errores de los que soy incapaz de
desprenderme.
Y cada vez que un disco muere, soy como un
naufrago
a punto de ahogarse en la ausencia de unos
y ceros.
Cargo fantasmas pensando que aquel fue el
tiempo que viví
aquel espacio que construyó lo que soy
ahora.
(pero
como vacío, como elusión, soy una nada esperando a ocurrir)
Cargo conmigo amores inconclusos y odios
efímeros
y con ellos construí un enorme bosque de espejos
rotos
Arboles de datos indiferentes, de raíces
pálidas y muertas
De rostros y bytes que ya ni siquiera
importan, que ya no duelen.
Me recuerdo con tanto detalle, con tanta
perfección
que termino desconociéndome.
Sepultado en aquella información
En aquel castillo de naipes y palabras
necias.
Y ya que te recuerdo con tanta claridad,
¿podré reconocerte cuando te vea?
Temo que si algún día te encuentro
En aquel pueblo vencido, en aquellas
calles rotas
Tendré
tan presente tu fotografía
que no podré reconocerte detrás de tu
rostro envejecido.
Comentarios
Publicar un comentario