He escrito un texto de ambiciones literarias con la ayuda de una I.A recientemente liberada al público. La herramienta que he usado se llama GPT-3 de OpenIA (el link dirige a la página oficial) y el cómo usarla se explica en este video.
Antes de esta nota, intenté con varios otros textos cuya estructura abierta superaba las posibilidades de l.A. Los motivos en mi opinión son los siguientes.
- No hay posibilidad actualmente de que la I.A detecte estructuras internas no textuales dentro del texto.
- Si bien puede captar y repetir hábitos gramaticales y lingüísticos, la I.A no planea nada todavía, y menos "comprende" lo que un texto creativo planifica entre lineas.
Pensando entonces en qué clase de estructura le permitiría a GPT-3 ayudar recordé que guardaba en alguna parte el inicio de esta narración; un bosquejo sin mucha gracia cuyo único propósito era contar cosas bizarras sobre religiones y sectas inventadas. En este bosquejo solo había escrito una entrada en realidad que utilicé utilizando como input para que la I.A escribiera las demás. Luego agregué a los hashshashin (que existieron en realidad, e inspiraron el videojuego assassin's creed) con la esperanza de que la I.A mezclara información sobre sectas reales.
Debajo de esta línea y en negrilla está el input. En itálica está lo que la I.A aportó a su manera.
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Hace un par de semanas encontré entre mis cuadernos viejos uno que venía de mis tiempos de estudiante de bachillerato en el colegio Andaki. Nunca dejan de impresionarme las marcas que me dejó ese lugar a pesar de que pasé ahí relativamente poco tiempo. El caso es que aquel colegio fue fundado por un sacerdote de apellido García, que por motivos variopintos desapareció dejando atrás su biblioteca. Con un grupo de amigos de aquellos años exploramos sus libros un par de veces; hicimos un concurso para ver quién encontraba el ejemplar más viejo, honor que se llevó un manual de religiones prohibidas; o diagrama kadosh de religiones secretas de 1834, editado en Sevilla por un colegio de estudios jesuita.
Otros textos que llamaron nuestra atención fueron Las Herejías cátaras, editado en 1888 por el padre Francisco Toro de Quevedo, los secretos satanistas de las logias parajesuitas del mar negro, escrito por el sacerdote Amadeo Isidoro Arameida, y el Malleus Maleficarum para las Antillas; o como identificar y combatir con magia sagrada a los practicantes del vudú; editado a nombre de la congregación hospitalaria de San Salvador.
El libro fue para mí y para mis amigos una cosa absolutamente extraordinaria, en primer lugar porque no era un libro para el público en general sino para uso interno de los sacerdotes católicos. Describía señales secretas de ciertas confesiones mucho más profundas de las que la gente suele hablar (masonería, rosacruces, carbonarios e iluminados) y mostraba un conocimiento quirúrgico (conseguidos seguramente a punta de torturas) de sociedades secretas minoritarias e interesantes. Alcancé a apuntar veinte ritos en total antes de que me expulsaran de ese colegio. Me he arrepentido muchas veces de no haber robado esos libros pues al año siguiente supe que el rector vendió toda la biblioteca como papel reciclable. Como era un joven tonto de poco talento documental mis apuntes son básicos y mi letra es desastrosa incluso para mí mismo. Sintetizo hasta la exageración textos de veinte o treinta páginas en dos o tres frases; siendo apenas un adolescente nunca imaginé que los libros fueran a desaparecer y que fuese imposible volverlos a encontrar.
Logia de los Arameos: fundada en tierra santa en 1564 por descendientes del cruzado Fray Alejandro de Bordoña. Su culto afirma que encontraron pruebas de la feminidad de Jesús y entre sus herejías estaba el hecho de afirmar que Cristo, como hijo de una virgen y sin intervención de un cigoto masculino, solo poseía características genéticas femeninas. Celebraban rituales de travestismo y castración renunciando a la masculinidad al que llamaban "el viejo pacto".
Los hashshashin: fueron una secta de Oriente Medio, activa entre los siglos X y XIII. Se hizo famosa a partir del siglo XI cuando tuvo su máximo poder en la dinastía Fatimí, por su actividad estratégica de asesinatos selectivos contra dirigentes políticos, militares y reyes. Durante varios siglos fueron una comunidad de partidarios del ismaelismo en Irán (por eso recibió el nombre de Orden de los Ismaelitas), es decir, una secta minoritaria del chiismo, a su vez minoritario en un país eminentemente sunní. En el año 1090, para ponerse a salvo de las persecuciones, y dirigidos por el carismático Hasan-i Sabbah, tomaron la fortaleza de Alamut, una posición inexpugnable en las montañas, al sur del mar Caspio.
Cabalistas del Buda dorado: una secta judaica que reconoce a Buda como uno de los grandes profetas del judaísmo, se nutren de la teología zoroástrica y la transforman en una religión dualista. Los cabalistas reconocen a Jesucristo como uno de los más grandes maestros de su doctrina y reconocen a Buda como el primer Adepto, aunque afirman que fue superado en sabiduría por Jesús. Su nombre proviene de una palabra hebrea que significa "el ungido". En su doctrina se reconoce que los cabalistas fueron los primeros en formular una teoría de la evolución y del desarrollo de la inteligencia, basándose en sus creencias en el karma y el reencarnacionismo. Las enseñanzas de las cabalistas están recogidas en el libro Zohar, escrito por el rabino Moshe ben Simeón ben Yohai en el año 1305.
Masonería rosacruz: fueron los primeros en admitir a mujeres en sus sociedades, lo que les ha llevado a ser considerados en ciertos grupos como feministas, aunque ese no ha sido nunca uno de sus fines. A diferencia de la masonería regular, la masonería rosacruz se inspira en una fuerza espiritual superior, el más allá, llamada señora arquitecta del universo.
Teogonistas: se trata de una secta gnóstica que asentaba el origen de la divinidad en un ser femenino llamado Sophia. Sus ritos requerían una pareja de hermanos que se entregaban sexualmente a la divinidad. Si los hermanos peleaban, cosa que era frecuente, la divinidad optaba por destruir al mundo.
Cátaros de Aztur: Su bautismo era realizado en sangre y su ritual era una mezcla de orgiástico y sadomasoquista. Su código era una mezcla de los diez mandamientos y el sexto libro de Moisés.
La logia de los hijos escarlata: Su libro sagrado era la Aurora roja, con la que pretendían conocer una magia oculta más poderosa que la blanca. En ella se mezclaban rituales de los alquimistas de la Edad Media con el simbolismo de la revolución francesa. Su ritual de iniciación consistía en cortar la lengua a uno de los miembros de la logia y dejarla que se desangrara hasta la muerte (Nota de Oscar: Si en la iniciación mataban a los iniciados de manera literal, seguramente no eran muy numerosos) El ritual de la iniciación se realizaba en una cueva en la que se dejaban restos de lo que llamaban comida (¡WTF!) que ni siquiera los animales comían y se cerraba con un poderoso conjuro que se repetía hasta que el recién iniciado moría.
El Sacramento maldito: Los miembros de este culto, según el manual de identificación de los sacerdotes de la congregación de San Salvador, se caracterizaban por una palabra que se les grababa en el brazo: esta palabra era: Arameos. Además, en los rituales se les cortaba el prepucio, se les azotaba el cuerpo con una correa y se les obligaba a beber una infusión de una planta llamada maguey. Los ritos más destacados de la logia, según el manual eran los siguientes: El "bautismo de sangre" o "bautismo de fuego", consistía en que los integrantes del culto se untaban la cara y el cuerpo con la sangre de una víctima sacrificada y luego se le arrojaban piedras, para que los rasguños de las piedras hicieran superficies de sangría. El "bautismo de luz", consistía en que los integrantes del culto se metían en un agujero de un metro de profundidad de donde el sol asomaba por un agujero. Los miembros tenían que permanecer en ese agujero durante un par de horas hasta que el sol los alcanzase. El "torneo de los seis toros" consistía en que los sacerdotes de la logia se enfrentaban en una pelea contra seis toros que les lanzaban sus cuernos. Si la pelea duraba más de una hora, los sacerdotes eran declarados dioses. El "bautismo de sangre y fuego" o "bautismo de fuego y sangre" consistía en que los sacerdotes se untaban con sangre y se metían en una cueva donde había fuego. Cuando salían, se les caía la piel y se les quemaban los huesos.
La familia del miedo: Fundada en 1455 por Asaví el Grande. Para practicar rituales necesitan una caja negra que contenía una piedra bizantina que se supone debe estar impregnada de sangre de alguna virgen. Los rituales parecen ser de carácter satánico, con sacrificios de animales y bebedizos de sangre.
Los judíos de los Caballeros de Malta: Se distinguían de los judíos tradicionales porque tenían cierta conciencia de sus orígenes. Además les eran frecuentes los rituales con tatuajes paganos: Su ritual principal consistía en entrar en calor en una cabaña, con un fuego enorme, y luego extirparse la carne del cuerpo a golpes con alfileres. Al final, el iniciado se queda cubierto de sangre, lo cual simboliza la muerte del viejo hombre para ser reemplazado por el nuevo.
Orden Sublimior: La iniciación ocurre en una logia "hueca" y se inicia por medio de sacrificios rituales y pauperización. Durante el resto del procedimiento, el iniciado es obligado a beber sangre de niño. Se utiliza una forma de iniciación basada en un texto de Alejandro Juren, que enseña que el mal es para el hombre un medio para el bien.
Société du Verreux du Soleil-Diable: la iniciación se realiza con la aceptación del código Negro del puado. El iniciado debe beber hidromiel cubierto por alguna sustancia, por ejemplo, sangre.
Constituciones de los Rockestoros: Una logia cuyo objetivo es luchar contra la iglesia católica y conseguir la separación de la iglesia y del estado. Fue fundada por Franz Binder, un exmasón izquierdista que fue capturado y reubicado como un prisionero de guerra en un comando por una compañía de paracaidistas. En abril de 1942 se fugó y tras recorrer un largo camino por los pantanos terminó convertido en Benedicto II.
Los sacerdotes de afrodita: eran una secta de sacerdotes que adoraban a la diosa afrodita. La secta se formó a finales del siglo XIX en Grecia. Se caracterizaba por celebrar rituales de orgías y sexo libre. Se dice que entraban en trance para contactar con el mundo de los espíritus.
Las brujas de Salem: En 1692, en Salem, Massachusetts, se inició una persecución contra las mujeres acusadas de brujería. La caza se inició cuando las niñas de la localidad comenzaron a tener visiones y a decir que habían sido poseídas por el diablo. Fue el pastor Samuel Parris quien, alarmado, acudió a la autoridad civil para denunciar el hecho. Se detuvieron a las primeras acusadas y se inició un proceso en el que se emplearon torturas para que confesaran. La mayoría de las detenidas eran mujeres pobres, solteras y sin educación. Muchas de ellas fueron condenadas a muerte.
Sectarios del Andakí: Logia secreta de estudiantes cuyo ritual de iniciación consiste en buscar libros secretos en la biblioteca de Monseñor García. Quien encuentra el libro más antiguo es sacrificado por sus compañeros mientras duerme, pero se salva si encuentra la Biblia o el necronomicón.
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Mi input habló de veinte sectas pero esa fue una promesa que no logré cumplir. Hay una especie de contaminación en la entrada de datos. Para lograr estas entradas " aceptables" tuve que hacer 38 intentos, naturalmente la mayoría fueron respuestas sin información útil. La forma más sencilla fue lograr "algo interesante" fue aportándole a la I.A los nombres, y aún así fue bastante proclive al bucle, repitiendo varias veces la misma información.
05/12/21
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